El chupete fue diseñado imitando al pezón materno y la mama, lo que hace que el cerebro lo procese como algo “natural” por lo que su grado de aceptación es del 100%. Las pantallas plásticas presionan los labios y la boca del bebé, provocando su rechazo porque el cerebro lo procesa como un “cuerpo extraño” y tienden a escupirlos. En mis 38 años de Pediatra nunca he visto a una madre que tenga los pezones con pantallas plásticas …

El niño desde que nace y hasta los 5 años, está sometido involuntariamente a la Etapa Oral, lo que lo obliga a la necesidad de succionar. El uso del chupete hará que el niño se mantenga relajado, tranquilo, concilie el sueño fácilmente y no usará a su Madre de Chupete. Al negarsele el chupete, se chupará el dedo, jugará con los labios, hará bruxismo nocturno, morderá todo lo que encuentre y lo que es peor, reemplazará el chupete por el biberón y se tomará 3 y 4 biberones de leche y 4 o 5 biberones de jugo y además comerá con ansias.